La adaptación teatral de la novela de Santiago Lorenzo recoge la aventura que les sucede a dos hombres, Manuel y su tío, después del que el primero haya herido a un policía y se de a la fuga, instalándose en una de las casas abandonadas de un pueblo al que deciden llamar Zarzahuriel
Un espectáculo que surge de la necesidad interna del propio autor, como artista y ser humano, de querer comunicar, desde la emoción y en primera persona, la teoría y, también, la “práctica” de todo lo aprendido después de “desaprender” primero